¡Aguas con las zoonosis transmitidas por garrapatas!

Las zoonosis son aquellas enfermedades o infecciones que se transmiten entre animales y personas, es decir que pasan de animales silvestres y domesticados al humano y del humano a animales, representando una amenaza para la salud y el bienestar de la población humana a nivel mundial. Las enfermedades zoonóticas son causadas por diferentes patógenos como virus, bacterias, parásitos u hongos y algunas de ellas pueden transmitirse por vectores (organismos que actúan como “vehículos” en el transporte y transmisión de patógenos de un individuo infectado a otro no infectado, sin que el patógeno le cause algún daño).

Usualmente los vectores son artrópodos como mosquitos, garrapatas, moscas, piojos y pulgas. De entre estos, las garrapatas son el segundo vector de patógenos en todo el mundo. Las garrapatas son ectoparásitos hematófagos, es decir que se alimentan de sangre, por lo que al alimentarse pueden transmitir patógenos (bacterias, virus y protozoarios) a animales y humanos, causando enfermedades con graves consecuencias para la salud de la población mundial. Pero ojo, no te asustes: ¡no todas las garrapatas están infectadas! ni todas las garrapatas tienen la capacidad de transportar y transmitir un patógeno.

 

Representación gráfica de la garrapata y los patógenos que transmite.

 

La importancia de las garrapatas como vectores de patógenos en el país datan de 1944, y las principales zoonosis que transmiten son la enfermedad de Lyme, la Fiebre Manchada de las Montañas Rocosas y la Ehrlichiosis Humana.

Los primeros casos reportados de la enfermedad de Lyme o borreliosis en nuestro país datan del año 2007. Esta es una de las enfermedades trasmitidas por garrapata más conocidas en Estados Unidos y en México cada año los casos van en aumento. La enfermedad de Lyme es causada por espiroquetas (bacterias con forma de espiral) del complejo Borrelia burgdorferi y se transmite al humano por cuatro especies de garrapatas del género Ixodes distribuidas a nivel mundial. En el caso de México, la bacteria se transmite por la garrapata de patas negras, Ixodes Scapularis, las cuales se distribuyen principalmente en el noreste centro, golfo del país, así como en la península de Yucatán.

Las manifestaciones clínicas que se presentan en el humano son: eritema migratorio en el sitio del piquete de la garrapata, y después de algunas semanas meningitis y artritis de Lyme, mientras que a largo plazo puede ocasionar problemas neurológicos, los cuales son totalmente prevenibles al tratarse con antibióticos como la doxiciclina, amoxicilina o cefuroxima.

 

La Fiebre Manchada de las Montañas Rocosas es una enfermedad causada por la bacteria Rickettsia rickettsii y se transmite al hombre por la picadura de la garrapata café del perro (Rhipicephalus sanguineus), que se encuentra distribuida en todo el territorio del país y garrapatas del genero Amblyomma (figura 2).

El período de incubación de esta enfermedad varía entre 2 y 14 días, es decir que durante ese lapso se podrían presentar síntomas como: fiebre, dolor de cabeza, dolor muscular, sarpullido, náusea, vómito y con menor frecuencia se observan dolor abdominal, diarrea y tos. Sin embargo, el diagnóstico de esta enfermedad muchas veces no se realiza a tiempo debido a que los síntomas son parecidos al de otras enfermedades. El tratamiento se basa en antibióticos como la doxiciclina, pero si la infección no se trata a tiempo puede causar la muerte por complicaciones como miocarditis, neumonitis, o falla renal aguda.

 

Ciclo de desarrollo y hospederos de las garrapatas infectadas con Rickettsia rickettsii, microorganismo causante de la Fiebre Manchada de las Montañas Rocosas.

 

Por último, la Ehrlichiosis Humana es una enfermedad con manifestaciones clínicas similares a otros padecimientos febriles como el dengue o zika. Es causada por la bacteria Ehrlichia chaffeensis y transmitida por garrapatas del género “Dermacentor''. La Ehrlichiosis monocítica humana fue descrita en Estados Unidos en 1994 y es en este país donde se dan la mayoría de los casos, mientras que en México la posibilidad de contraerla es muy baja. El primer caso de Ehrlichiosis monocítica humana fue reportado en el año de 1997 en Yucatán. Los síntomas más frecuentes son: fiebre, escalofríos, erupciones maculares en piel, principalmente en las extremidades, dolor en articulaciones, dolor muscular, dolor de cabeza y disfunciones orgánicas múltiples.

 

¿Cómo prevenir las enfermedades transmitidas por garrapatas?

Es importante tener cuidado al visitar el bosque, prados en donde hay ganado o áreas con arbustos densos o matorrales, ya que a las garrapatas les gusta permanecer entre esas áreas en las que pueden sobrevivir largos períodos de tiempo hasta encontrar un huésped del cual alimentarse. Por lo tanto, se recomienda caminar por los senderos evitando caminar matorrales, vestir ropa de colores claros pues será más fácil visualizar si hay alguna garrapata, llevar los pantalones metidos en los calcetines, así como el uso de zapatos cerrados. También, es conveniente utilizar repelentes contra insectos y garrapatas que contengan DEET aplicándolos a las partes expuestas del cuerpo y en la ropa.

Al regresar a casa, revisa tu cuerpo especialmente en las zonas de pliegues (ingles, axilas, ombligo y región genital) ya que las garrapatas tienen preferencia por las zonas calientes y húmedas del cuerpo. Además, es importante revisar a las mascotas, ya que también son susceptibles de contraer garrapatas, especialmente en el pelo y la piel (alrededor y dentro de las orejas, alrededor de los ojos y de la cola, ingles, detrás de las patas delanteras, debajo del collar). En caso de encontrar garrapatas, es importante darle el tratamiento adecuado a tu mascota para eliminarlas y así evitar la transmisión de enfermedades.

 

¿Y si me pica una garrapata?

 

Si notamos que nos picó una garrapata o la tenemos adherida al cuerpo es importante retirarla o extraerla con mucho cuidado mediante una tracción suave con una pinza que se aplica lo más cerca posible de la piel. Posterior a la extracción, se recomienda limpiar el área con agua, jabón y antiséptico. Se recomienda guardar la garrapata y conservarla en un contenedor pequeño, en el caso de que se quede alguna parte de la garrapata bajo la piel o se presenten síntomas como fiebre, inflamación, enrojecimiento o erupción en la piel que se haga más grande de lo normal, dolor muscular, etc.). Es importante acudir a tu unidad de salud más cercana y llevar a la garrapata para que se identifique y se analice para identificar al microorganismo causante y recibir el tratamiento adecuado.

 

En los últimos años se han descubierto nuevas enfermedades zoonóticas gracias al avance en los métodos de diagnóstico que facilitan el reconocimiento de microorganismos. Adicionalmente, algunos de los factores que han contribuido al incremento de las zoonosis son el crecimiento de la población humana a nivel mundial, la expansión a nuevas áreas geográficas que invaden nichos ecológicos silvestres facilitando la transmisión de patógenos al ser humano, la adaptación de los microorganismos a nuevas condiciones ecológicas, la migración y la popularidad de actividades al aire libre como el senderismo y la pesca.

El riesgo de enfermar depende de factores como: el lugar donde vives, pasear en áreas boscosas o con matorrales, viajar a lugares donde hay un mayor riesgo de contraer enfermedades transmitidas por garrapatas e incluso el simple uso de repelentes de insectos.

Por último… ¿Sabías que el 6 de julio se conmemora el Día Mundial de las Zoonosis? Se designó ese día debido a que el 6 de julio de 1885, el científico francés Luis Pasteur inyectó la primera dosis del tratamiento de la vacuna antirrábica al niño Joseph Meister quien fue severamente mordido por dos perros rabiosos y cuyo tratamiento resultó exitoso.

Esperamos que la información de este blog contribuya a ampliar y difundir el conocimiento sobre las enfermedades zoonóticas transmitidas por garrapatas.

 

Referencias bibliografías

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